jueves, 24 de noviembre de 2011

Voluntariado + empresas = mucho por aprender

La celebración del II Congrés Europeu de Voluntariat ha sido una oportunidad para avanzar en nuevas formas de colaboración, para incentivar y motivar que las personas se hagan voluntarias.
El voluntariado de empresa es uno de los temas que se trató en el programa, sobre el cual hice un post previo. Destacaba diversos aprendizajes que se podían desprender de la colaboración entre empresas y organizaciones desde el punto de vista de la empresa.
Desde la experiencia de haber creado, diseñado, gestionado, coordinado y dinamizado diversos programas de voluntariado corporativo quisiera destacar algunos aprendizajes.

Desde el punto de vista de la empresa:
  • El programa de voluntariado debe ser una acción más dentro de una política global de responsabilidad corporativa.
  • Cada empresa debe encontrar su propio modelo de programa de voluntariado corporativo.
  • Hay la firme implicación de las personas responsables de la empresa.
  • También es necesario invertir: tiempo, dinero, personas...
  • Hay madurez de los directivos y los empleados.
  • Hay que tener la mente abierta. Contemplar nuevas acciones, propuestas, maneras de hacer...
  • Es necesario evaluar resultados cuantitativos y cualitativos.
Desde el punto de vista de la organización:
  • El voluntariado de empresa no quita trabajo.
  • Por el contrario, el voluntariado de empresa (inicialmente) nos dará más trabajo.
  • La relación con empresas es una puerta abierta a nuevos públicos.
  • Hay que considerar los voluntarios que vienen de la empresa como nuevos amigos.
  • Debemos estar abiertos a formas creativas para dar cabida a los voluntarios de empresa en nuestra entidad.
  • Una buena acción para sensibilizar!
  • Hay que dejar la puerta abierta, con la empresa, para establecer otros vínculos.
No hay un modelo único ni válido para todas las relaciones entre empresas y organizaciones.
Cada empresa debe tener claro, para empezar, porque quiere poner en marcha un programa de voluntariado corporativo y que éste sea coherente con su política global de RSE. A partir de aquí, hay que diseñarlo y poner los recursos adecuados para conseguir los objetivos que, desde la compañía, se planteen.
El voluntariado de empresa está formado por personas que se acercan por primera vez en la entidad. La diferencia con otro voluntario es el canal que ha utilizado para acercarse a la entidad (la empresa). De la organización depende la imagen que llevará esa persona de nuestra causa, de nuestros proyectos. Es una oportunidad para hacer nuevos amigos.
Creo firmemente que el voluntariado corporativo es una oportunidad para acercar el mundo asociativo y el mundo de la empresa, para compartir conocimientos, habilidades y aptitudes, para crecer juntos y construir una sociedad más justa y cohesionada. Conseguirlo depende de todos: empresas y organizaciones.

Resumen traducido de los artículos “Voluntariat + empreses = molt per aprendre (I)” y “Voluntariat + empreses = molt per aprendre (II)” publicados en Xarxanet.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Futuro 3.0, la oportunidad de la responsabilidad

Tiempos revueltos los que vivimos hoy día. No solo por la gran y larga crisis económica que nos afecta. También hay otros temas relevantes que despuntan ahora, y sobre todo despuntarán e influirán en los patrones de comportamiento y consumo futuros. De todas estas cuestiones destacan: 

  • El espectacular incremento del precio de los alimentos, como los cereales, y de materias primeras, como el petróleo. 
  • Los cambios de hábitos de vida más saludables. 
  • La malnutrición infantil; la preocupación medioambiental de aspectos como la huella ecológica. 
  • La utilización de energías renovables, la gestión de residuos durante todo el ciclo de vida del producto. 
  • Los trastornos de hábitos alimentarios. 

Frente a este panorama, podemos sentarnos y esperar de brazos cruzados a ver qué pasa. A lo mejor, y con mucha suerte, no pasa nada y podemos seguir haciendo lo que sabemos hacer: vender productos. Pero podemos convertir estos problemas en oportunidades tomando el timón del barco. Y la brújula marca el norte. Por ello, debemos trabajar una estrategia competitiva que nos permita seguir la dirección correcta: una estrategia de marketing 3.0. 

El futuro está ahí y, aunque no puede predecirse, sí se puede encarar con mayores garantías de éxito e, incluso, moldearlo. Dependerá del papel que como empresa queramos tomar. Preguntémonos, entonces, cuál queremos que sea. 


Empresas 3.0
Las empresas deben adaptarse a un nuevo entorno y la clave para hacerlo son los valores. Es la marca la que debe conectar con los valores del consumidor y no al revés, como hasta ahora. 

Las empresas deben ganarse la confianza de las personas y deben gestionar los valores, la cultura corporativa y las relaciones. Como apunta Philip Kotler en “Marketing 3.0 Values – driven marketing”, la identidad, la imagen y la integridad, son las 3 i’s a tener en cuenta, y la base para construir reputación y confianza hacia nuestras empresas y marcas. 

En esta línea, para crear capital reputacional, y generar así confianza en la marca, no basta con gestionar la imagen y la identidad, también es necesario gestionar la integridad. La integridad es ser coherentes con lo que dice y hace la empresa, asentando de esta manera las bases para conseguir una marca sólida, reputada y en la que poder confiar. 

Vea el artículo completo en Código 84, la revista de AECOC para los profesionales de la Fabricación y la Distribución.